"Llegué a Ucrania hace tres años. Me vine a estudiar idiomas. Acá me enamoré y me casé con una ucraniana. Tengo una hija de casi dos años. Después del primer año acá me quedé sin trabajo, por lo que tuve que sacar mi 10% en Chile. Luego, empecé a trabajar en el rubro de la construcción .

Vivo en Kiev, la capital. No tengo contacto directo con chilenos, pero en Facebook estamos en un grupo. Ahí me he contactado con un par, pero es difícil, porque la mayoría no quieren hablar, están bien cerrados.

Tengo un canal de YouTube donde hablo de la mezcla cultural entre Latinoamérica y Ucrania. En los últimos meses mi contenido ha dado un giro hacia el conflicto actual. De hecho, ahora viajé a una ciudad cercana al conflicto de Donetsk -en la región de Donbás- para documentar lo que está ocurriendo.

"El gobierno no ha mandado ninguna alerta, pero se habla mucho de la cooperación entre Ucrania y la OTAN".

El conflicto actual es un tema muy complicado. Es algo que se arrastra desde 2014 por Crimea. También el gas juega un rol fundamental. Rusia quiere recuperar lo que era de ellos antes, el dominio de la Unión Soviética y controlar todo el sector de Ucrania, Bielorrusia, donde Vladimir Putin tiene un aliado homólogo. Siempre ha sido un problema, pero ahora se ha intensificado porque la OTAN está más cerca de Ucrania. Por eso los rusos se ponen más bravos. Bajo su interpretación, no quieren perder lo que es suyo.

El ambiente político está tenso. El presidente Volodímir Zelenski llama a la calma, pero igual nos preocupamos. Él ha sostenido reuniones con distintas autoridades de Estados Unidos, Reino Unido y la OTAN. Han mandado armamento y soldados. Hay tensión, se siente. En cualquier momento podría estallar algo. El gobierno no ha mandado ninguna alerta, pero se habla mucho de la cooperación entre Ucrania y la OTAN.

***

Muchas personas están preocupadas, se están preparando para un conflicto. Yo estoy abastecido en mi casa. He comprado lo más básico que uno necesitaría en caso de una guerra, como alimentos no perecibles y velas. Acá dicen que debo tener cuidado en caso de que corten la luz.

Pero no todos están preocupados: hay gente que no se ha abastecido, porque los supermercados todavía están con productos. La gente vive su vida normal. De hecho, los niños siguen yendo al colegio y los adultos van a trabajar como cualquier día.

"Yo estoy abastecido en mi casa. He comprado lo más básico que uno necesitaría en caso de una guerra".

He considerado emigrar de Ucrania, me gustaría volver a Chile. Pero tengo un problema con los papeles de mi hija. Para un extranjero con hijo ucraniano -como yo- es difícil conseguir la documentación para sacarlos del país. Aunque su mamá sea local, la autoridad pone muchos obstáculos. Hay trabas y uno tiene que hacer gestiones especiales para que le entreguen pasaporte.

Nosotros hemos mandado solicitudes para apurar los papeles de mi hija, pero no ha resultado. Por el momento, tendré que esperar tres meses por lo menos. Son las leyes de acá y uno como extranjero las tiene que respetar.

Yo no estuve en Ucrania cuando estalló el conflicto con Crimea, en 2014. Este sería mi primer conflicto bélico si esto avanza. 

Tengo familia en Chile. Todos los días me preguntan cómo estoy, cómo avanza la situación, cuáles son los peligros. Yo los voy actualizando. Estoy esperando a que no ocurra nada. Nadie quiere un conflicto. Estados Unidos ya mandó tropas. Todo lo que sea movimiento militar puede poner tensa la situación.

Me he comunicado con el consulado chileno en Polonia. Ellos están tratando de comunicarse con los chilenos acá para tomar los datos, como el teléfono y la dirección.  La idea es guardarnos en la base de datos. Fueron bien amables, les conté la situación con mi hija.

Mi idea es que Rusia, tarde o temprano, va a atacar igual. Hay civiles que están preparándose con armamento, haciendo ejercicios militares. También hay voluntarios que están entrando a las reservas.

No se sabe cuándo va a estallar. Yo, mientras tanto, me estoy preparando”.